Érase una vez una ciudad: Y DE PRONTO LLEGA...

6/25/2006

Y DE PRONTO LLEGA...

Miro mis pies, tienen una forma normal, un tamaño diminuto, una claridad incolora y su grosor que está lejos de ser famélico. E Inti-Illimani vuela en mi cabeza y me azota sus notas musicales en la memoria. Visualizar una vez más aquella vida en la que todo trascurría en la absoluta incertidumbre, donde cada mañana parecía ser la última, donde los amigos eran mi veneno y mi salvación. Solía divertirme sin hacer prácticamente nada, ahora me he vuelto más exigente. Sentada en el sofá azul de casa de Caracol, mirando el enrejado al fondo de la ventana y fumando Alitas, mientras ella cambiaba de disco a diestra y siniestra, solía estar medianamente contenta, pensaba que no tenía nada que perder en ese momento, que si salía y un coche me aplastaba o un perro me orinaba, daba lo mismo. Recuerdo haber escuchado por primera vez el disco de Amelié y Underground, de Kusturica, en su casa, recordar parte de mi infancia jugando Rummy, enterarme que enlataban el pozole y que las paperas son una enfermedad real y no sólo enfermedad de caricatura. Pero había momentos que me sentía infinitamente perdida (lugar común) y tristeando era mi estado habitual y necesario. A veces trataba de subir y coleccionar una que otra estrella decadente, no soporto los espacios muy iluminados.