5/08/2006

SEÑORA VENGANZA


Ayer pintaba para ser un día de lo más bueno, estar con mi Ranita, con mi carnalito El Saussure, leer a David Toscana, ir al cine, cenar y seguir leyendo y en algún momento lograr dormir y sobrevivir otro día. Pero noooooooooooooooooooooooooooo, todo el plan se quedó en el cine. Fuimos a la Cineteca a ver Señora venganza, una peli coreana que me negaba a ver, pensé que sólo iba a tener karatazos y un chingo de sangre, pero nada de eso, me quedé sorprendida de lo bien y bonito que filman los coreanos, los cuadros son de una belleza, precisión y perfección delirante. Me quedé tan absorta y sumergida en la película, pues me gustó muchísimo, que cuando terminó la peli nos levantamos y salimos de la sala, caminamos al estacionamiento (pasaron como tres minutos) y de pronto, ¡oh, noooo! Recuerdo que había dejado mi bolsa en la sala, René regresó corriendo a la sala y ya no la encontró. El corazón me brincó, me enojé, me preocupe, me dio hueva la situación, más que nada por incomodidad, por incertidumbre, por que ya me había arruinado el día y mi gastritis-próxima a úlcera mortal comenzaba a estrujar mi estómago.

El Saussure trató de calmarme, René me consoló, yo maldije al pinche mundo y traté de respirar. Llegué a mi casa y le dije a mi papá y me puso como lazo de cochino (nota: nunca he entendido qué coños quiere decir eso, pero creo que así se dice cuando lo regañan a uno (a)).

Mi madre se aventó una letania y Molke (mi hermana) casi me cuelga del dedo pulgar del pie izquierdo, pues la bolsa que perdí era de ella (Ooops i did it again!) Paso siguiente fue marcar a mi celular, pos pa’ ver si él o la que tuviera mi bolsa se apiadaba de mí y me contestaba el celular y me decía: “Claro yo tengo tu bolsa y no he tocado nada y te la regresaré inmediatamente”. Pero nooooooooooooooooo (again), sonó y sonó mi celular y luego lo apagaron y me mandaba al buzón. Ya dejé un correo de voz que dice: no seas…inche y dame mis cosas, pero de la forma más decente, (idependientemente de todo, soy una dama). Es la hora en que no contestan mi celular y empiezo a resignarme y dejarlo ir, pero por primera vez en mi vida quiero madrearme a alguien, dejarlo tirado en un charco de sangre y su cuerpo, previamente mutilado, maquillarlo con mi desprecio; ser despiadada y sólo un poco “bondadosa” para dejar que pida perdón tres veces y luego dejarlo tirado en medio de la nada con un escupitajo mío en su carota.

Porca miseria!





Lirva en calidad de desconsuelo

creado a las 3:52 p.m.  | |

<< Principal

Érase una vez una ciudad...

[ info ]

Robertha Mayer
Mi vieja ciudad

Soy hipocondriaca, soberbia, adicta a los lacteos, gemela de mi otra hermana, mi tipo de sangre lo desconozco, el teléfono me lo ahorraré, mal-vivo en una ciudad desolada, soy disque universitaria, no me defino como poeta maldita, sólo escribo frases cortas.


[ dejame un mensaje ]



[ En la ciudad se está leyendo... ]

[ archivos ]

[ Los chicos y chicas del barrio ]

[ Calles y callejones donde puedes transitar ]


[ contadores y otros bichos ]

eXTReMe Tracker

Licencia de Creative Commons
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.



[ layout por ]

Templates By Marina

Sin ti las emociones de hoy son la mugre de ayer - Hipólito

Ceci n'est pas une bise

¿Quién quiere vivir ahí?

Tómense un whisky con mi flaco

Remedios para una mujer

Postal del viaje perfecto

El Café de Nadie